No hay peor enemigo de la realidad que el número que indica una balanza.
No existe peor forma de estereotipar que a través de lo físico.
No hay espejo que pueda reflejar lo que realmente somos.
No todas las modelos son tontas. No todos los modelos son huecos.
No solo los 90 60 90 deberían aparecer en campañas de publicidad.
Cada persona es única, y eso es algo que toda marca de ropa debería defender, luchar y exhibir directamente en sus campañas. Y este es el caso de la nueva campaña de Uniform, que a través del planteo de un “cementerios de maniquíes” ataca a la industria y demuestra que ese número idiota que marca la balanza, puede significar todo lo contrario.